Jumanji: así es el juego de mesa

Hay juegos que son mucho más que un simple entretenimiento. Juegos que pueden cambiarte la vida para bien… y para mal. Y Jumanji es uno de los que sin duda te marcan para siempre, porque es un pasatiempo bastante especial. Si decides empezar a jugar con él debes saber que las consecuencias puedes ser catastróficas, y es que hay mucha magia en este tablero de madera. Cada tirada puede marcar un punto de inflexión, y solo quien llegue al centro y pueda gritar la palabra mágica será capaz de terminar con el juego, si es que se le puede seguir llamando así. Jumanji es, más bien, una aventura en la que tendremos que mostrar nuestra habilidad y nuestro valor para enfrentarnos a retos absolutamente demenciales. Traer la selva y todos sus peligros al lugar en el que estemos jugando, y sobrevivir a las plagas, ataques de animales y otros obstáculos que nos lo pondrán muy difícil…

En 1981, el autor y dibujante Chris Van Allsburg lanzó al mercado un pequeño álbum ilustrado llamado precisamente Jumanji. Era la primera que se hablaba de ese juego de tablero mágico, y el libro se convirtió en un éxito instantáneo. Era divertido, intenso y entrañable, pero también tenía escenas realmente peligrosas. Todo giraba en torno a un juego de mesa que podía traer a la vida a los animales y peligros de la selva cuando estabas jugando. El reto no solo era acabar el juego… sino hacerlo con vida. El éxito de aquel libro no solo consagró a su autor, sino que también llevó a Hollywood a crear una adaptación bastante libre, eso sí, con un reparto y un equipo de producción de lujo. La película de 1995 se convirtió en un clásico instantáneo, y recientemente hemos podido continuarla con algunas secuelas que, aunque tratan de mantener la esencia de la original, van por otros derroteros. Pero lo que quizá no sabías es que existe de verdad el juego de mesa Jumanji, y puedes disfrutar de él con toda tu familia… si te atreves.

Jumanji: la película

En 1995, Joe Johnston, habitual colaborador por Spielberg y George Lucas, dirigió la película basada en el libro ilustrado de Jumanji. Se decidió hacer un filme familiar, aunque la película cuenta con numerosas escenas que seguramente podrían ser catalogadas de terroríficas para los más pequeños. Robin Williams, toda una estrella ya en aquella época, lideraba el reparto, haciendo, como no, de niño grande. Bonnie Hunt le acompañaba como su pareja adulta. También estaban Bradley Pierce y Kirsten Dunst, en uno de sus primeros papeles importantes. La película tuvo un gran éxito en taquilla, rozando los 300 millones de dólares, y se convirtió en un verdadero clásico para toda una generación. Las secuelas, aparecidas recientemente, también mantienen ese estilo de cine familiar de aventuras, aunque ni mucho menos llegan al nivel de calidad de la original.

Lanzamiento del juego de mesa

Hollywood es una máquina de hacer dinero y por supuesto, no iba a dejar pasar la oportunidad de aprovechar el lanzamiento de un filme basado en un juego de mesa para llevar ese producto a la realidad. Recordemos que hasta 1995, Jumanji era solo un pequeño libro infantil ilustrado, de notable éxito, eso sí, pero no existía ninguna versión real de aquel tablero maldito. A partir del lanzamiento de la película, la productora que tenía los derechos del juego permitió que se reprodujera el mítico tablero que había creado para el filme. Existen réplicas de madera maciza con todos los detalles del juego, pero lo que nos interesa a nosotros es el verdadero juego de mesa. Diferentes marcas, como Giocchi, lanzaron sus versiones para tablero, que hoy por hoy todavía se pueden conseguir, y que se basan en el juego que vemos en pantalla.

¿Cómo se juega?

El juego de mesa de Jumanji trata de asemejarse lo máximo posible al de la película, teniendo en cuenta que aquel era un juego “mágico” donde las cosas ocurrían en el mundo real. Si caíamos por desgracia en la casilla de los monos, estos aparecerían como de la nada en nuestra casa. Lo mismo ocurría con los mosquitos, o con el resto de animales peligrosos. Aquí, obviamente, no debemos temer por la integridad de nuestro hogar, como sí ocurre en el filme de 1995. Sin embargo, sus creadores lo han dado todo para que sintamos esa misma emoción al jugar a esta versión de Jumanji. Se trata de un juego de mesa en el que tendremos que avanzar a través de numerosas casillas, cada una de ellas con un peligro, hasta llegar al centro. Es para cuatro jugadores, y solo hay un ganador, el primero que llega al centro del tablero y grita Jumanji, tal y como ocurre en la película.

Lo interesante de este juego es que cuenta con cartas de peligro, que vienen a ser algo así como los retos a los que debemos de enfrentarnos. Estas cartas tienen un mensaje que no se puede leer a simple vista, y hay que decodificar con un filtro que encontramos en el centro del tablero. Esto está colocado así para darle mayor “realismo” con el juego que aparece en la película de 1995. Después de lanzar nuestro dado de tirada, avanzaremos las casillas que nos indique y nos enfrentaremos al resto con nuestro dado de rescate. Este dado nos facilitará una herramienta para luchar contra el enemigo que nos aparece, y puede ser más o menos efectiva. Si superamos los retos, podremos seguir avanzando hasta completar todo el tablero. Son 30 cartas de peligro en total, cada una personalizada con un enemigo distinto. El dado de rescate cuenta con 8 caras, simbolizando las armas de las que dispondremos. Por eso, el juego sigue siendo divertido incluso cuando ya lo hemos probado varias veces, ya que hay múltiples alternativas y opciones para llegar al final.

Similitudes con el juego de la película

Está claro que jugar a este Jumanji real es mucho más seguro que hacerlo al juego que aparece en la película. Aquí no habrá embestidas de animales, ni plagas de mosquitos, ni tampoco aparecerá un malvado cazador sin escrúpulos dispuesto dispararnos en cuanto tenga ocasión. Sin embargo, gracias a las cartas de peligro, podremos disfrutar de toda la emoción de Jumanji en el juego de tablero. Como en el de la película, aquí también tendremos que enfrentarnos a esos peligros surgidos de lo más profundo de la selva. Es un juego igualmente para cuatro personas, cada uno con sus tótems de animales. Y en las versiones originales, las cartas de peligro traen sus enunciados con un “bonito” poema. Este no aparece en la parte central, algo que sería mucho más complicado, pero sigue dándole un toque muy especial al juego.